Una buena técnica de lactancia materna ayuda a mantener la producción de leche y evita la posible aparición de grietas y dolor. Descubre las mejores posiciones de amamantamiento.
La OMS recomienda la lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses de edad, y acompañada de alimentos complementarios apropiados hasta los 2 años de edad o más.
Amamantar a tu bebé puede ser una de las experiencias más gratificantes que experimentes como madre, pero es posible, y completamente normal, que al principio te resulte un poco complicado.
Una buena técnica de lactancia materna ayuda a mantener la producción de leche y evita la posible aparición de grietas y dolor.
No existe una única posición adecuada para amamantar, lo importante es que estés cómoda, que tu bebé esté enfrentado y pegado a tu cuerpo y que se agarre bien al pecho, introduciendo gran parte de la areola en su boca, para que al mover la lengua no lesione el pezón.
Según te vayas familiarizando y acostumbrando a amamantar a tu bebé, podrás ir probando distintas posiciones hasta que encuentres en la que ambos os sintáis más a gusto y tranquilos.
Puedes utilizar almohadas o un cojín de lactancia para apoyar tus brazos (al bebé es mejor que lo sostengas tú para favorecer el agarre).
Posición de cuna
Esta es una de las posiciones para amamantar más común. Consiste en sostener la espalada de tu bebé apoyada en tu brazo, colocando su tronco pegado a ti y con la cabeza enfrente de tu pezón. Con la otra mano, dirige el pecho hacia la boca de tu bebé y cuando éste la abra, acércalo con suavidad a tu pezón.
Posición rugby
La posición rugby es otra opción para amamantar a tu bebé. Coloca a tu bebé por debajo de tu axila con sus piernas dirigidas hacia tu espalda y su cabeza hacia tu pecho. Es importante sujetar su cuello y hombros para facilitar el agarre. Esta posición es adecuada para amamantar a gemelos y prematuros.
Posición recostada en cama
La posición recostada en cama es muy cómoda para las tomas nocturnas y los primeros días de lactancia. Recuéstate de lado en la cama con tu bebé también tumbado de lado y con su cuerpo enfrentado al tuyo. Cuando abra la boca, acércalo con suavidad al pecho para facilitar el agarre.
Posición reclinada
La posición reclinada permite desarrollar los reflejos de gateo y búsqueda de tu bebé. Acuéstate reclinada unos 30-45 grados boca arriba y coloca a tu bebé boca abajo sobre ti. Ayúdale a llegar al pezón con tus brazos. Es una postura de lactancia ideal para las primeras tomas o cuando exista algún problema de agarre (dolor, grietas, rechazo del pecho…).
Y si después de leer todas estas posiciones para amamantar te han surgido dudas sobre cuál es la mejor, recuerda que lo más importante es utilizar la postura en la que tu bebé y tú os sintáis más cómodos y consigáis un mejor agarre.
Referencias
Asociación Española de Matronas.Los Consejos de tu matrona. Apréndelo todo sobre tu embarazo y primeros meses del bebé.2022.87-96.Disponible en: https://www.losconsejosdetumatrona.com/wp-content/uploads/2022/03/GuiaMatronas_22.pdf
Díaz Gómez M. Lactancia materna. Asociación Española de Pediatría (AEP). Guía práctica para padres. Desde el nacimiento hasta los 3 años.2013.108-117. Disponible en:https://enfamilia.aeped.es/sites/enfamilia.aeped.es/files/guia_practica_padres_aep_1.pdf
Díaz Gómez N.M. Comité de lacatancia materna. Asociación Española de Pediatría (AEP). Técnicas de lactancia materna. Disponible en: http://lactanciamaterna.aeped.es/tecnicas-de-lactancia-materna/